Nuestra Congregación Espiritual de la Nueva Jerusalén, sigue adelante enarbolando muy en alto, el puro y blanco Estandarte de la Verdad, que emana del Divino Padre Creador, recibida desde Lo Alto a través de Madrecita Laura Antonia, la Profeta del Apocalipsis en el siglo XX. Vamos impulsados por el sublime sentimiento del amor fraterno, expresando muchas verdades con palabras valientes y seguras, y recordando las verdaderas enseñanzas del Divino Maestro Jesús, el Mesías, que Él dejó en su paso por la Tierra. Al mismo tiempo rechazando los falsos dogmas hechos por hombres que no han conocido al Divino Creador, como el “Celibato Eclesiástico y el “Perdón de los Pecados”, “La Muerte”, “El Infierno”, “La Única Vida”, etc. que son practicados por algunas religiones terrenas petrificadas en el pasado, que viven de un Mensaje ya añejo y que no han sabido evolucionar y transformarse de acuerdo a la Verdad, así como todo evoluciona y se transforma en la Tierra y en todo el Universo, porque lo que no evoluciona, muere, desaparece. ¡Ésa es la Ley Divina!
Debemos recordar siempre, que en el Universo Infinito todo es transitorio, que todo tiene un ciclo de Principio y Fin; que en este mismo momento, así como se están formando nuevos Mundos, también están despareciendo otros. Que solo nuestro Divino Padre Creador, que es la Causa Primera de Todo, es Eterno; y también lo son los espíritus humanos que pueblan los infinitos Mundos y el espacio inconmensurable del Universo Infinito, porque son Creación del Padre Divino y con Su Divina Esencia.
Muchas de nuestras aseveraciones y verdades, les parecerán imposibles y demasiado fuertes, pero hermanos, el tiempo que nos queda en esta dura y afanosa existencia terrena, ya llega a su fin. Por lo tanto, conviene que todos sepamos lo que nos espera, que es El Fin de la actual mal llamada civilización tecnológica y materialista, de esta Humanidad del siglo XXI.
A través de este humilde sitio web, desde hace algún tiempo hemos tratado de dar a conocer a ustedes, lo que sabemos de la maravillosa Ciencia Espiritual, tal cual la hemos recibido de nuestros Maestros, que no son de la Tierra, sino de Planetas elevadísimos del Universo, emisarios directos del Divino Padre Creador, del Divino Maestro Jesús, el Mesías y de Madrecita Laura Antonia, que hoy está junto al Trono del Padre Divino.
Esperamos confiados, que con la ayuda del Divino Padre, estas sencillas palabras de Verdad, como una semilla bendita, lleguen a vuestras mentes y a vuestros espíritus, para que los que están “llamados” (No los incurables) encuentren la verdadera Luz, que les muestre claramente el sendero preciso, que les servirá para lograr progreso espiritual y así poder integrar el grupo de los “pocos escogidos”, como lo señaló El Mesías, que habrán de ser salvados de la Hecatombe Final.
“Gloria al Divino Padre Creador en las alturas y paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad”.
Madrecita Laura Antonia
El hombre de la Tierra se encuentra en el más absoluto adormecimiento mental y espiritual, el materialismo y la soberbia que rige a todos los pueblos de este Planeta contraviene los Mandatos del Divino Padre Creador.
Los religiosos con sus dogmas milenarios han fabricado un dios propio que se adapta al pensamiento de cada ser humano, y alejan al hombre del Verdadero Dios, El Rey de Reyes, el Divino Padre Creador, Dios Todopoderoso.
Que grandes verdades estoy encontrando en su página. He buscado en muchas partes y con esto de la tecnología cualquier persona que busca a Dios tiene miles de opciones, pero aquí he encontrado las respuestas a muchas interrogantes que nadie me había podido clarificar.
Las preguntas sin respuesta que muchas veces me dijeron “son misterios de Dios” y a mí no me parecía que Dios pusiera tan intrincadas situaciones para pruebas del hombre y leyendo lo que está escrito en estas páginas empiezo a entender muchas de esas preguntas que nunca en el pasado encontraron respuestas lógicas.
Gracias a ustedes porque siempre pensé que Dios me pondría en un camino donde por fin encontraría respuestas verdaderas y lógicas respecto a los tiempos que vivimos.
Claudia Hermosilla